Y nada viene, y nada va, todo queda incierto en un adiós inconcluso, despedida tras despedida que se convierten en sonrisas enrojecidas por humos tribales. La sangre cambia se vuelve un poco y poco mas espesa, las venas ya no son lo suficientemente fuertes, un corazón débil y cansado choca a una realidad lejos de un cielo y una tierra. Queda en un medio, un purgatorio monótono igual que un ayer que se ve lejos de un mañana. Los corazones sin poder un poco más caminan lentamente en un espacio sin estrellas lejos un calido astro que endereza el trecho largo por recorrer, los pasos cada vez mas largos dejando pisadas mas lejos, sonriendo por un pasado y abriendo paso en el mundo.
martes, 17 de junio de 2008
lunes, 16 de junio de 2008
Pensado y pensando, recordando y llorando, observando miles de vidas lejos de mi y no puedo hacer nada mas que pensar e imaginar, solo imagino una utopía, las cosas que pasan por la mente y te dicen que estas vivo y que sientes, y tan solo imaginando, respiro y pienso, voy y hago, extrañado por una realidad falsa, una burbuja que se corta y aparece sin decir nada.
Las miles de realidades cortadas por cuchillos sin filo, dejando hilos entrelazados entre vida y realidad, los pensamientos corren, y entre estos las personas se dividen, poco a poco despedazando mas aquellos hilos que unían y que ahora paso a paso van golpeando, haciendo mas estrecha las líneas de vida en las manos, comprimiendo sueños e ilusiones, empujándonos a un abismo infinito lleno de preguntas solitarias, sin respuestas, ni letras por decir. Una caída mas por dentro, que nos hace sentir que la inmensa soledad nos llena y ya la caída parece cada vez mas algo menos grave, por momentos, cientos de sentimientos mezclados corren en la venas, dando una caída mas lenta, las esperanzas una vez mas golpeando fuertemente haciéndonos ver luz en oscuridad, llevándonos consigo a la realidad a una realidad llena de monotonía, la rutina de un amanecer y una puesta de sol y un sentimiento de insignificancia, una costumbre que no cansa, ni pesa, un sueño que toca vivir al caer el dia.
Las miles de realidades cortadas por cuchillos sin filo, dejando hilos entrelazados entre vida y realidad, los pensamientos corren, y entre estos las personas se dividen, poco a poco despedazando mas aquellos hilos que unían y que ahora paso a paso van golpeando, haciendo mas estrecha las líneas de vida en las manos, comprimiendo sueños e ilusiones, empujándonos a un abismo infinito lleno de preguntas solitarias, sin respuestas, ni letras por decir. Una caída mas por dentro, que nos hace sentir que la inmensa soledad nos llena y ya la caída parece cada vez mas algo menos grave, por momentos, cientos de sentimientos mezclados corren en la venas, dando una caída mas lenta, las esperanzas una vez mas golpeando fuertemente haciéndonos ver luz en oscuridad, llevándonos consigo a la realidad a una realidad llena de monotonía, la rutina de un amanecer y una puesta de sol y un sentimiento de insignificancia, una costumbre que no cansa, ni pesa, un sueño que toca vivir al caer el dia.
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